El rol del psicólogo, para muchos, no está aún bien
definido y permanece ambiguo en el nebuloso campo de la Psicopatología.
Tal como ocurre con otras profesiones, el rol del psicólogo puede ser confundido con
el rol del psiquiatra, profesionales médicos que se dedican al diagnóstico y tratamiento
de las enfermedades mentales, que están capacitados para recetar psicofármacos,
para indicar internaciones y para controlar el seguimiento y evolución de sus
pacientes.
Los profesionales psiquiatras que cuentan con los
necesarios estudios psicoterapéuticos complementarios, pueden realizar
psicoterapias; pero los que no tienen estos conocimientos, si su paciente
necesita un tratamiento combinado, deben
realizar la derivación a un psicólogo.
Un psicólogo no está habilitado para atender a enfermos
mentales que necesitan medicación y tratamiento médico específico, a menos que
sea derivado por un profesional psiquiatra para realizar una psicoterapia.
El rol del psicólogo clínico se centra en la
psicoterapia y en la elaboración de psicodiagnósticos mediante la aplicación de
tests psicológicos.
Una psicoterapia está indicada para el tratamiento
de los trastornos de conducta, las dificultades de adaptación a las distintas
etapas de la vida, los problemas de aprendizaje y de la adquisición del
lenguaje, las crisis de pareja y de la adolescencia, los desórdenes del
desarrollo, las alteraciones de la nutrición, los duelos por las pérdidas y los
cambios, los problemas de relación social y laboral, la orientación vocacional,
los trastornos sexuales, las adicciones, etc.
El psicólogo clínico también puede elegir especializarse
en una de estas áreas y dedicarse exclusivamente a ella.
Una psicoterapia puede basarse en distintas teorías
psicológicas para realizar un tratamiento o bien dedicarse a una rama
específica de la psicología y trabajar únicamente dentro de ese marco teórico.
La psicoterapia breve por ejemplo, es una forma de terapia
de objetivos limitados, que se centra en el motivo de la consulta y que utiliza
los recursos de la Psicología Cognitiva, o sea del aporte que brindan las
Teorías del Aprendizaje, de la Psicología Social, de la Programación
Neurolingüística y de la Dinámica de Grupos.
El Psicoanálisis, tradicionalmente es una forma de
tratamiento prolongado que utiliza los recursos de las Psicologías Profundas,
como la Teoría del Inconsciente de Sigmund Freud y de Carl Jung.
Como no se puede ignorar la importancia del pasado
en el trastorno actual que experimenta una persona, en la psicoterapia breve
también se le brinda especial atención a la historia personal pero sin
detenerse en ella, sino para relacionarla con la circunstancia presente que
afecta al paciente.
En la psicoterapia breve el psicoterapeuta
interviene en las sesiones en forma más activa mediante señalamientos y
brindando alternativas, mientras que en el Psicoanálisis es el paciente el que
a través de su propio discurso, puede darse cuenta por sí solo de su propio
conflicto.
Actualmente, el Psicoanálisis también se practica en
forma no ortodoxa con buenos resultados.
Malena Lede - Psicóloga
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